BUENOS AIRES.- Con un acto en homenaje por los 50 años de su debut artístico, el Gobierno de la Ciudad inauguró la noche del lunes, en el teatro Gran Rex, una escultura de Sandro en tamaño natural. Será exhibida en la puerta del teatro sólo de día para evitar actos de vandalismo, según explicó el secretario de Cultura porteño, Hernán Lombardi, en diálogo con Clarín.com.
La obra fue hecha por Fernando Pugliese, el mismo artista que realizó las de Olmedo y Portales ó la de Hugo del Carril, inaugurada la semana pasada en la vereda del Luna Park y presentada ante las fans, que se acercaron al teatro con rosas, batas rojas y carteles con mensajes de amor para el cantante.
Según contó el artista, la escultura representa al artista sentado en un sillón, rememorando sus éxitos y toda la gente que lo quiso. Es la quinta versión que hizo de Sandro: “Cuando terminé la quinta versión de la escultura, que yo creí que estaba buena, vino Graciela Guiñazú y me dijo que ´Sandro no tenía esos zapatos, tenía botas´ y me consiguió las originales. Después me dijo ´el traje tampoco era así, era cruzado´, después que ´el pañuelo no era blanco, sino rojo´ y que ´el anillo no tenía una S sino que el signo del zodíaco´ y se pasó durante 30 días viniendo al estudio con un amor lírico hacia Sandro”.
Durante la inauguración, no faltó la presencia de Olga Garaventa, la viuda de Roberto Sánchez. “Es una gran emoción volver a entrar aquí, pero sola. No es fácil, y creo que es él un gran merecedor de esto porque terminó su carrera aquí. Creo que es algo maravilloso que esté su escultura en la puerta de este teatro. Colaboré entregando sus botas, su anillo y viendo como se iba haciendo para que quedara bien”.
Uno de los invitados de la noche fue el músico y compositor Raúl Porchetto, quien detalló anécdotas de su amistad con Sandro. “En el 93 fue la primera vez que fui a su casa y desde allí, me volví su hermano. (…) Era un hombre que no se agotaba en dos conversaciones. Era jocoso, no paraba de jorobar y muy querido por todos. (…) Roberto no se va a diluir con el tiempo porque creo que con su cancionero aportó al arte argentino. (…) Me gustaba provocarlo. Un día lo fui a ver al hospital y él estaba por cumplir 64 años. Lo miré y le dije que ya estaba como los Beatles, viejo pero con pelo. Me miró, se rió y empezó a cantar ´When I get older, loosing my head, many years from now", letra del tema When I'm sixty four (Cuando tenga 60 años).
Por su parte, Lombardi se declaró un fanático del “Gitano” y señaló: “Sandro está inscripto en la cultura porteña, la cultura argentina y Latinoamericana. Yo era de esos jóvenes que no lo entendía y cuando lo empecé a admirar iba a todos los recitales. Esta escultura me parece muy importante porque amiga a la Ciudad con sus ídolos. Para evitar actos de vandalismo, la escultura se guardará de noche en el hall del teatro y será expuesta en la vereda durante el día”.
El 19 de agosto de 2010, el dueño del Gran Rex, Alberto Cordero, pidió que se colocase una placa con una leyenda de reconocimiento al “Gitano” por su trayectoria y cantidad de shows que realizó en el teatro a lo largo de su carrera: “En este escenario, Sandro, artista popular, excepcional, conmovió y convocó multitudes llegadas de todo el mundo. A Roberto Sánchez en el 65º aniversario de su nacimiento. Legislatura de la Ciudad autónoma de Buenos Aires - 19 de agosto de 2010”. (Clarín.com)